Historias de Terror: El regalo que no quiero
Advertencia: esta entrada está un poco confusa, porque protejo identidades y no cuento con tanto detalle.
Hay una persona con la que tengo nula relación, si bien por formalidad tengo cierto parentezco con ella, es solo de nombre. Al principio, la interacción, de parte mía, partía de la premisa de ser educada. Es decir, el nivel más básico de comunicación, donde se mantiene el respeto, pero no se avanza en nada. Lo bueno, es que independiente que la otra persona mostraba discursos grandilocuentes de cariño hacia mi, podía sentir que era de los dientes hacía afuera, era una forma de creer que la relación era más fuerte de lo que realmente era.
Pasó el tiempo, y por cosas del destino, esa persona se alojó en mi casa, ahi "sacó las garras" y se transformó en visita non grata. La verdad yo no interactué mucho con ella, porque tenía un aura de toxicidad extremo. Al final por algunas conversaciones, donde yo no tuve nada que ver, se fue. Desde ahí, esa persona, comenzó una guerra paulatina por recuperar a su ser querido y como yo, era su obstáculo, algo así como Yoko Ono. Optó por olvidar todo el "cariño" profesado hacia mi y me transformé en la piedra en el zapato.
Pasó el tiempo, y por cosas del destino, esa persona se alojó en mi casa, ahi "sacó las garras" y se transformó en visita non grata. La verdad yo no interactué mucho con ella, porque tenía un aura de toxicidad extremo. Al final por algunas conversaciones, donde yo no tuve nada que ver, se fue. Desde ahí, esa persona, comenzó una guerra paulatina por recuperar a su ser querido y como yo, era su obstáculo, algo así como Yoko Ono. Optó por olvidar todo el "cariño" profesado hacia mi y me transformé en la piedra en el zapato.
Ahora, la situación ha cambiado porque por a, b o c motivo, soy importante de nuevo. Asi que, si bien no se ha comunicado conmigo, me ha mandado mensajes de bendición, de cariño y cuanta cosa melosa existe. Para mi, la situación cambió, no voy a ser maleducada, pero no quiero ningún contacto con ella.
Uno de esos gestos, es mandar un regalo. Esta persona vive en otro país de Sudamérica así que optó por fedex para enviar la encomienda y ese es justamente el regalo que no quiero. Intuyo que hay en esa caja y por lo mismo, no quiero recibirla. Por otra parte, me parece descortés no aceptarlo, pero lo que si tengo claro, es que no voy a usar nada de lo que mande.
Este paquete ha tenido un montón de problemas, desde que costó una millonada el envío, hasta que han llamado continuamente de fedex para pagar la internación, con la sorpresa que por ese regalo, no solo hay que pagar ese monto, si no también los "gastos extras" de bodega y trámites que fedex está haciendo. Por lo mismo ese "regalo" ya estaba empezando a costar alrededor de 125 dolares. Costo que rechacé de plano a pagar, porque la otra persona, dijo que pagáramos nosotros y que después reembolsaría, para después decir que no podía hacernos el depósito y que buscaría una forma de devolver el dinero (yo le creo, pero quizás eso involucra algún encuentro en persona, por lo que descarté esa opción).
En síntesis, estábamos tan hartos de llamadas insistentes de fedex y correos de la otra persona que decidimos "presentarlos", para que entre ellos buscaran la solución. Hasta el momento sé, que se solucionó el asunto, así que, según la otra persona, debo estar pendiente. Y es bastante freak estar pendiente de un regalo que no quiero, fruto del empecinamiento de alguien que no me interesa.
Este paquete ha tenido un montón de problemas, desde que costó una millonada el envío, hasta que han llamado continuamente de fedex para pagar la internación, con la sorpresa que por ese regalo, no solo hay que pagar ese monto, si no también los "gastos extras" de bodega y trámites que fedex está haciendo. Por lo mismo ese "regalo" ya estaba empezando a costar alrededor de 125 dolares. Costo que rechacé de plano a pagar, porque la otra persona, dijo que pagáramos nosotros y que después reembolsaría, para después decir que no podía hacernos el depósito y que buscaría una forma de devolver el dinero (yo le creo, pero quizás eso involucra algún encuentro en persona, por lo que descarté esa opción).
En síntesis, estábamos tan hartos de llamadas insistentes de fedex y correos de la otra persona que decidimos "presentarlos", para que entre ellos buscaran la solución. Hasta el momento sé, que se solucionó el asunto, así que, según la otra persona, debo estar pendiente. Y es bastante freak estar pendiente de un regalo que no quiero, fruto del empecinamiento de alguien que no me interesa.
Solo hay que alejarse de las personas non grata es todo ...en cuanto a el nombre de tu blog es lo más extraordinario que hay adoro esa expresión y por abc motivo yo pensaba que solo mi hermana lo decía jajaj,saludos abrazos y abrazos.
ResponderEliminarGracias por tu comentario! Y sigo esa premisa.
ResponderEliminarTambién me gusta esa expresión, es tan chilena y a la vez tan cierta. Hay cosas que uno cree que pasa en nuestro entorno y luego nos damos cuenta, "que en todos lados se cuecen habas":)
Saludos!